martes, enero 12, 2010

Que día tan melancólico . . .
por la mañana la tranquilidad.
en la tarde las mejillas duelen de tanto reir,
sin pensar en nada mas que en el dolor de las constantes carcajadas,
pocas veces disfrutadas a tal punto en el pasado;
por la noche la nostalgia me embarga por su ausencia inducida.
Y antes de dormir se apodera de mi la confusión.

No hay comentarios.: